En principio esta receta asusta por la cantidad de procesos que lleva, pero una vez adaptada al nivel doméstico, es sólo cuestión de ser ordenados a la hora de elaborarla y la cosa se simplifica bastante, aunque también debo decir que prescindiendo del tomate, el risotto de chipirón resulta riquísimo y acompañado de unos chipirones pasados rapidamente por la plancha queda un plato muy lucido y mucho más sencillo.
Pero vamos con la receta tal cual.